MI GATO ESTÁ TRATANDO DE DECIRME ALGO...

 

 

 

Existen situaciones como mudanzas, remodelaciones, la llegada de un nuevo bebé a la familia, etc., que pueden generar distintos grados de estrés en nuestro gato.

 

 

Muchas veces creemos que nuestros gatos son indiferentes a nuestro llamado y a nuestros mimos, o que les importan poco las indicaciones que les damos, pero en realidad son animalitos muy inteligentes y que no se andan con rodeos. A diferencia de los perros, la mayoría de felinos no son muy falderos, pero eso no significa que no sean mascotas muy cariñosas y que disfrutan al máximo de nuestros mimos.

 

Los felinos son animales que les gusta mantener una rutina, desplazarse por lugares conocidos, dormir en el mismo rincón, pasearse por los mismos adornos de siempre que saben que no van a botar, siempre y cuando no se los cambien de lugar. Los gatos son tan arraigados a ciertos espacios y cotidianeidades que una mudanza puede desencadenar, sobre todo para un gato adulto, un desenlace tan grave como una enfermedad muy seria. Cuando hay cambios en nuestra vida como la llegada de un bebe, de una nueva mascota, un nuevo inquilino, una remodelación, una mudanza, etc., estas situaciones generan en nuestros gatitos un grado de estrés que puede ir de leve a severo, y ¿cómo darnos cuenta de esto?, ellos mostrarán ciertos signos de disconformidad a los que debemos estar atentos; por ejemplo: no come con la misma intensidad, emite sonidos distintos a los de costumbre, no sale a recibirnos ni nos pide mimos y, muy importante: no se acicala. Hay que saber que el acicalamiento en un gato es señal de salud, de bienestar, de que se siente cómodo y seguro en el ambiente donde se encuentra. Si bien el ronroneo puede significar que un gato está a gusto y disfrutando un momento con su dueño, también hay estudios que demuestran que un ronroneo intenso puede indicar que nuestro gatito está tratando de compensar el estrés o malestar que le está causando alguna situación.

 

Hay afecciones recurrentes en la clínica de gatos como por ejemplo: acúmulo de bolas de pelo, problemas dentales, enfermedades del tracto urinario, entre otras, que van a generarle dolor severo y lo muestran mediante el cambio de postura al orinar en problemas renales o de vejiga, y mediante la salivación excesiva y disminución de apetito en gingivitis u otros problemas dentales.

 

Los gatos comúnmente son sigilosos y 'mátalas callando' como se dice coloquialmente, y muchas veces sus enfermedades también lo son, por esta razón es muy importante aprovechar los momentos de mimos y de engreimiento para tocarlos, revisarlos y poder detectar alguna anomalía que su frondoso pelaje nos puede estar ocultando, ya sea alguna masita o bulto, una herida, o una baja de peso severa.

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