LOS PELIGROS DE LA SUPRESIÓN DE SÍNTOMAS

Existen ciertas prácticas terapéuticas que no concuerdan con el espíritu de la medicina naturista. Una de ellas sería la terapia de supresión de síntomas, con la que se intentan eliminar los síntomas que evidencia el organismo (y que deben considerarse siempre como respuestas positivas). Dice un viejo refrán naturista que, en muchos casos, “la enfermedad es el acto de desenfermar”.

 

El tratamiento sistemático destinado a reducir la fiebre, la diarrea, la transpiración, las contracturas o dolores, las erupciones o alergias, etc., suele ser, desde un punto de vista naturista, perjudicial para el organismo, ya que lo único que se consigue es un alivio momentáneo para el paciente (a veces imprescindible) a costa de provocar una mayor incidencia de enfermedades crónicas más difíciles de tratar.

 

Este no es un concepto nuevo en medicina, ya que desde los albores de ésta, se ha entendido el proceso curativo como un esfuerzo del organismo que provoca distintos síntomas, a menudo desagradables, que conviene soportar.

 

 

30/11/2021

 

 

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