IMPORTANCIA DE LA ACTIVIDAD FÍSICA EN LA TERCERA EDAD

 

Así como debemos prepararnos a lo largo de la vida, para afrontar y superar con éxito cada etapa y experiencia que vivimos, pues igualmente llegar a la tercera edad conlleva la necesidad de habernos preparado tanto física como mentalmente durante las décadas previas, para vivir esta etapa de la manera más saludable posible.

 

Alcanzar las edades máximas que el ser humano puede vivir, constituyen un verdadero logro y por ende, es sinónimo de orgullo y honra para quien lo ha conseguido. Por ello, debemos respetar, ayudar y honrar a todas las personas que se encuentran en esta etapa, porque si bien es cierto que es un logro digno de admirar, también es cierto que se trata de una fase difícil en la que las personas son más vulnerables, pues algunas pierden ciertas capacidades físicas y cognitivas, presentan enfermedades como depresión, ansiedad, alzheimer, demencia, cataratas, osteoporosis, artrosis, diabetes, enfermedades cardiovasculares, entre otras, así como tienen que enfrentar limitaciones y ciertos grados de exclusiones familiares, sociales y laborales, por los distintos estereotipos existentes sobre la vejez, incluso reforzados de acuerdo a las distintas culturas en el mundo.

 

Uno de los mayores problemas de alcanzar la tercera edad, consiste en la inactividad física, por la falsa creencia de que el deterioro físico y mental no permiten practicar ejercicio a esa edad; lo cual es completamente erróneo, pues es precisamente todo lo contrario, ya que la falta de actividad física es la que conlleva a un deterioro del cuerpo y de la mente, y ese sedentarismo, es el que hace más propensos a los individuos a desarrollar las enfermedades propias de la edad adulta.

 

Por ello, para que esta etapa sea transitada con la mayor de las fortalezas y salud posibles, es esencial mantener una rutina de actividad física desde las etapas previas a la tercera edad, para llegar a ella con condiciones físicas óptimas, y de ninguna manera abandonar la práctica del ejercicio ni del resto de las actividades acostumbradas cuando se alcance esta edad. Solo se necesita voluntad y constancia para lograr esta meta, la cual no es nada inalcanzable, pues con tan solo 20 minutos diarios, se puede lograr el propósito de cumplir una rutina de actividad física capaz de brindar múltiples beneficios.

 

Beneficios de realizar actividad física en la tercera edad

- Previene la pérdida ósea ya que fortalece los huesos.

- Mejora la salud de las articulaciones, ayudando a reducir la sensibilidad, el dolor y la rigidez propios de la artritis.

- Disminuye el riesgo de sufrir lesiones, pues mejora la fuerza, la flexibilidad y el equilibrio.

- Mejora la salud del corazón.

- Reduce el riesgo de enfermedades cardiovasculares.

- Mejora la circulación sanguínea.

- Mejora la respiración pues mejora la capacidad pulmonar.

- Beneficia al metabolismo.

- Reduce los problemas digestivos como los gases y el estreñimiento.

- Promueve la salud mental, pues ayuda al buen funcionamiento del cerebro, reduciendo el riesgo de demencia senil.

- Reduce el riesgo de desarrollar enfermedades crónicas como la diabetes.

- Ayuda a controlar el riesgo de obesidad.

- Mejora el estado de ánimo, reduciendo los síntomas de depresión y ansiedad, pues se liberan las hormonas endorfinas reguladoras del estado de ánimo.

 

Existen muchas opciones para realizar una buena actividad física en la tercera edad, como las caminatas, el yoga, la bailoterapia, la natación, etc., sin embargo, realmente no existe ninguna limitación en cuanto a actividad física se refiere en esta etapa, pues existen muchísimos ejemplos grandiosos de personas de la tercera edad, que destacan a nivel mundial por practicar ejercicios más extremos como artes marciales, paracaidismo, ciclismo, atletismo, equitación, fisicoculturismo, maratones y patinaje sobre hielo, entre muchos otros.

 

Recuerda que si bien es cierto que lo ideal es comenzar a hacer ejercicio desde las primeras etapas de la vida y mantenerlas de manera constante a lo largo de la existencia para gozar de una salud óptima, no es menos cierto que nunca es tarde para comenzar si nunca antes adoptaste este estilo de vida. Si has alcanzado la tercera edad, si estás próximo a alcanzarla o si tienes algún familiar o conocido que está transitando esta etapa, y nunca han realizado actividad física, no se desanimen; motívense y promuevan iniciar esta esencial actividad que les brindará muchos beneficios, bienestar físico y mental, alegrías y ánimos para vivir esta edad con la mayor motivación y optimismo.

 

 

 

Fuentes de información:

todo-mail.com

 

28/05/2021

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