CAUSAS DEL CANSANCIO Y TIPS PARA REDUCIRLO

 

El cansancio, agotamiento o fatiga corporal, es una sensación física en la que se tiene poca fuerza o energía para realizar las actividades cotidianas. Puede estar clasificado en cansancio normal y en cansancio patológico, entendiendo por el primero, a aquel cansancio que surge de manera normal tras un trabajo forzado, una actividad física demandante, o por causa de un estado emocional de tristeza, estrés, preocupación, desilusión, aburrimiento, falta de sueño, etc.; y entendiendo por cansancio patológico, a aquél que es desproporcionado, ya que no se correlaciona con ninguna actividad física que amerite una falta de fuerza o energía tan grande.

 

La  presencia del cansancio, es un síntoma o consecuencia de algo; por lo que se debe estar atento a su aparición, sobre todo si se observa la presencia del cansancio patológico, que puede ser un aviso de alguna enfermedad. Por tal razón deberá ser un médico especializado quien se encargue de identificar la causa del cansancio para aplicar un tratamiento adecuado; ya que son muchas las enfermedades que pueden producir un cansancio patológico, por lo que no debe pasarse por alto este síntoma. Una enfermedad detectada a tiempo, puede tener una solución más fácil si se le aplica el tratamiento adecuado de manera temprana.

 

Tips para reducir el cansancio

Hay algunas acciones que se pueden ejecutar durante el día para aumentar los niveles de fuerza y energía en el cuerpo que permitan combatir el cansancio y que ayudarán a detectar si el cansancio que se está sintiendo se trata de un cansancio normal o patológico:

 

- Tener una alimentación saludable, que incluya carbohidratos, proteínas, fibras, grasas buenas, vitaminas y minerales necesarios para una dieta balanceada, así como alimentos ricos en hierro que prevengan la aparición de anemia.

 

- Nunca saltarse las comidas, sino por el contrario, realizar 4 comidas diarias con meriendas intercaladas, siendo fundamental el desayuno, el cual debe ser completo y suficiente, para que proporcione la energía necesaria para todo el día, y una cena ligera para que no interrumpa el descanso nocturno.

 

- Reducir el consumo de sal y azúcar.

 

- Hidratarse suficientemente, ingiriendo de 2 a 3 litros de agua diarios.

 

- Si se va a ejercitar, debe tomarse agua antes, durante y después del ejercicio.

 

-  Evitar el sobre entrenamiento físico, así como el sedentarismo, por lo que será ideal encontrar un punto medio que permita una actividad física regular y saludable.

 

- Mantener estados de calma mental, que se pueden conseguir mediante el apoyo de algunas disciplinas como la meditación, el yoga, los masajes, entre otros.

 

- Ayudar al organismo a eliminar las toxinas acumuladas, por lo que se podrá optar por hacer dietas depurativas.

 

- Dormir por lo menos 8 horas diarias.

30/07/2021

 

 

 

 

 

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