ESCANEO CORPORAL: CONECTA CON TU MENTE Y CUERPO



Un escaneo corporal es una práctica que consiste en dirigir atención plena a diferentes partes del cuerpo y notar cualquier sensación física, tensión o área relajada. Aquí hay una guía para hacer una meditación de escaneo corporal diario:

1. Encuentra un espacio tranquilo y cómodo. Elige un entorno donde no te distraigas fácilmente. Puedes sentarte en una silla o recostarse. Baja las luces.

2. Adopta una postura relajada. Cierra suavemente los ojos o suaviza la mirada. Deja ir cualquier tensión.

3. Lleva tu atención a tu respiración. Nota la sensación de la respiración cuando entra y sale de su cuerpo.

4. Explora tu cuerpo de la cabeza a los pies. Comienza dirigiendo tu atención desde la cabeza, la cara, el cuello, los hombros, los brazos, el pecho, el abdomen, la espalda, las caderas, las piernas y los pies. Tómate el tiempo necesario con cada área. 

5. Observa sin juzgar. Mientras te enfocas en cada parte del cuerpo, observa cualquier sensación física, como calor, hormigueo, tensión o relajación. Recuerda abordar esta práctica sin juzgar y con curiosidad, aceptando lo que surja sin tratar de cambiarlo.

6. Respira en áreas de tensión. Si encuentras áreas de tensión o incomodidad, imagina la respiración trayendo relajación y liberación a esas áreas. 

7. Completa el escaneo y reflexiona. Una vez que hayas terminado, toma un momento para reflexionar sobre la experiencia. Observa cómo se siente tu cuerpo como un todo. Toma nota de cualquier idea u observación que surja durante el escaneo. 

 

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