NATURALEZA EN CASA

Cualquier representación de elementos naturales vivos en nuestra vivienda siempre es una muestra de vitalidad y vida; pero a nivel vital, en un entorno cerrado, lo ideal es saber qué lugar corresponde a cada elemento natural.

La energía que fluye por nuestra vivienda vibra de diferente forma según va circulando por ella.

La iluminación, la orientación, la estructura y la personalidad vital de las personas que la habitan influyen en la calidad vibratoria del ambiente general.

Lo que comúnmente se conoce como 5 elementos, son, en origen, 5 tipos de vibración.

La madera, el fuego, la tierra, el metal y el agua son diferentes tipos de vibración natural que, según el lugar que ocupan en nuestra casa, refuerzan o debilitan las diferentes zonas según su colocación y orden.

En un espacio natural, los elementos se nutren y se compensan unos a otros, pero en un entorno cerrado como en una vivienda, la energía se cristaliza y el comportamiento es más limitado.

Cuando cada elemento ocupa el lugar adecuado, la energía vital general fluye en armonía tanto en el ambiente, como en el interior de las personas que lo habitan.

Si no conoces las zonas adecuadas de tu vivienda para cada elemento, es recomendable tener, al menos, una pequeña representación de cada uno de ellos en las diferentes estancias.

De esta forma, entre ellos se ordenan y compensan la necesidad de cada zona.

A. Tarazona

16/07/2021