CUIDADOS EN LA ALIMENTACIÓN DEL ADULTO MAYOR DURANTE LA CUARENTENA

 

 

Como hemos escuchado en múltiples medios de comunicación, el coronavirus afecta de manera más severa a la población adulta mayor y a personas con enfermedades preexistentes, como la obesidad.

 

Según la Sociedad Española de Geriatría y Gerontología, "La obesidad no es solo sinónimo de un peso corporal elevado. El concepto de obesidad requiere que dicho exceso de peso se produzca a expensas de tejido graso, y no de otros tejidos corporales como el músculo o el hueso".

 

La obesidad puede desencadenar una serie de enfermedades como el síndrome de apnea del sueño, reflujo gastroesofágico, insuficiencia venosa crónica, artrosis de articulaciones y cáncer. Además, la obesidad en adultos mayores puede generar inmovilidad; esto se debe a que la cantidad de tejido muscular no es suficiente, ni tiene la misma fuerza para movilizar el exceso de peso. Este concepto recibe el nombre de obesidad sarcopénica. Lo ideal es prevenir, y para ello se busca en lo posible mantener una actividad física de 20 minutos diarios.

 

Dentro del plan nutricional no se debe descuidar la ingesta proteica, para no perjudicar la masa muscular. Se recomienda el consumo de alimentos bajos en grasa y con alto aporte proteico. Como nutricionista, aconsejo el consumo de proteína mixta; pero en el caso de veganos o vegetarianos, pueden consumir proteínas de origen vegetal (quinua, menestras, tofu, semillas). Dentro de los carbohidratos se recomienda el consumo de cereales integrales.

 

Es importante no restringir los carbohidratos y grasas totalmente, debido a que la proteína necesita del aporte de energía de los carbohidratos y grasas para absorberse.

 

Durante la cuarentena se pueden producir cuadros de ansiedad por la comida, por lo que tenemos que recurrir a los alimentos que generen mayor saciedad como los frutos secos (nueces, maní, almendras, pecanas) que además aportan omega 3.

 

 

El consumo de agua debe ser de 30ml por Kg de peso. Se recomienda consumir verduras y frutas diariamente por su aporte de vitaminas, minerales y antioxidantes. Estos componentes van a contribuir a mantener un sistema inmunitario adecuado. Las leches y yogurt vegetales también pueden incluirse.

 

Entre las restricciones, deberíamos disminuir el consumo de sal, reducir la ingesta de carbohidratos simples, como dulces, postres, helados, y azúcar refinada.

 

Es importante identificar primero los hábitos no saludables que se pueden modificar en esta población; por ello, la alimentación debe ser colorida, llamativa a la vista y con mucho sabor. Con el paso de los años las papilas gustativas se modifican y no se siente el “sabor” de los alimentos como cuando se es joven, por lo que debemos cuidar la ingesta de alimentos nutritivos, equilibrados, saludables y emocionalmente positivos en el adulto mayor. En diversos estudios se ha demostrado que un adulto mayor que lleva una alimentación saludable puede revertir muchos de los cambios que se generan producto del envejecimiento.

 

Cuando hablamos de una alimentación emocionalmente positiva nos referimos a alimentos y preparaciones que generen recuerdos positivos. Estos recuerdos generan emociones que van a lograr una mejor relación con el plan nutricional, y con ello, el adulto mayor podrá cumplir con facilidad las recomendaciones brindadas por el nutricionista.

 

El plan nutricional que lleve un adulto mayor debe ser agradable a la vista, además, se tienen que considerar preparaciones conocidas, sin restricciones excesivas, que le gusten para generar apego al plan nutricional. Si no consideramos estos detalles, podría ocurrir que el adulto mayor no tome en cuenta las recomendaciones del profesional y que incumpla con el plan nutricional.

 

Realizar ejercicio o actividad física diariamente según sea la condición física del adulto mayor contribuirá a la disminución de peso, aumentará su capacidad de respiración, elevará su sistema inmunitario, además de todos los beneficios de la actividad física. El ejercicio también contribuye a adoptar una actitud positiva frente a la mejora de los hábitos alimenticios y además ocupará su tiempo en durante el estado de cuarentena.

 

Si es necesario, se deberá buscar tratamiento psicológico que reforzará el efecto de la dieta y del ejercicio.

 

Acompañemos a los adultos mayores en esta cuarentena. Apoyémoslos en realizar sus compras y en todas sus necesidades para evitar que salgan de sus casas.

 

 

 

Lic. Ximena Chávez Alonso

Nutricionista Geriátrica - CNP 5738

Creadora y editora de la web: ximenachavez.com

Contacto: nutricionista@ximenachavez.com Facebook: Ximena Chávez – Nutrición para el adulto mayor

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