EPIFANÍAS
Epifanía significa aparición, manifestación o fenómeno a partir del cual se revela un asunto importante. La palabra proviene del griego epiphaneia, que significa “mostrarse” o “emerger”.
Una epifanía hace referencia a cualquier tipo de elemento que se manifiesta de manera inesperada, sea divino o no. Por ejemplo, una buena idea que aparece de repente puede ser considerada "una epifanía".
En el sentido filosófico, epifanía puede referirse a una profunda sensación de realización al comprender la esencia o naturaleza de las cosas. Significa que se ha tenido una revelación o pensamiento único e indescriptible.
Epifanía puede ser un pensamiento ilustrado, una inspiración que parece ser una cosa de Dios.
La epifanía es como una percepción repentina y abrupta y/o un cambio de perspectiva que transforma el concepto individual de sí mismo e identidad a través de la creación de un nuevo significado en la vida del individuo.
Las epifanías ocurren cuando esos momentos cambian profundamente a las personas mismas y cómo se ven a sí mismas y su lugar en el mundo.
Las epifanías son un momento eureka; un momento profundo. Digamos que hay un problema con el que he estado luchando en el trabajo, en el que todo se congela en un solo momento, y yo digo: '¡He resuelto el problema!'. Las epifanías son así, pero se refieren a nosotros mismos, o hacia dónde vamos con nuestras carreras o en la vida. Las epifanías son cosas muy personales.
Para que sea más probable que tengan una epifanía, las personas deben:
· Permanecer abiertos a la experiencia.
· Estar en sintonía con lo que sucede a su alrededor y sus propias reacciones a esos eventos.
· Estar dispuestos a centrarse en profundidad en quiénes son y tener una idea de su dirección en la vida.
Para tener más probabilidades de tener epifanías, las personas deben tener una mentalidad más presente, estar más comprometidas con el momento presente. Ya sea que se trate de desarrollar la práctica de la meditación consciente o de dejar el teléfono celular y prestar atención al mundo que te rodea, con más curiosidad.
Por ejemplo, salir a caminar sin teléfono celular, estar consciente de todo lo que puedo hacer sobre lo que está sucediendo en el mundo que me rodea, y pensar a través de diferentes perspectivas. A su vez, noto mis propias reacciones de lo que está sucediendo y pienso en quién soy y en mi dirección actual en la vida. Esta es una forma muy eficaz de cultivar una mayor conciencia plena sobre el mundo que nos rodea. Cualquier estrategia personal que ayude a las personas a ser más reflexivas y estar más en sintonía con el mundo que las rodea puede ser útil para fomentar las epifanías. Lamentablemente, esta es una habilidad que algunas personas piensan que estamos perdiendo como sociedad.
Los que realizan múltiples tareas y aquellos que son reacios a tomarse un tiempo para reflexionar sobre sí mismos no deberían sorprenderse de que no estén experimentando epifanías.
Algunas personas parecen estar bloqueadas ante la perspectiva de un cambio personal importante. Es posible que no estemos resolviendo algunos de los problemas que nos rodean porque somos resistentes. No estamos dispuestos a explorar quiénes somos y a qué nos enfrentamos tanto como deberíamos. Y no estamos tan abiertos a los eventos que suceden a nuestro alrededor como podríamos estarlo. No estamos buscando ideas, o al menos pistas o posibilidades asociadas con la vida cotidiana, o pensando en cómo nos vemos a nosotros mismos y hacia dónde vamos en la vida.
Nuestras mentes son capaces de realizar hazañas notables, hasta el punto de que pueden reorientar nuestro trabajo y carreras al generar epifanías; pero su poder solo se desata por completo cuando nos abrimos a la perspectiva de un cambio a nivel de identidad.
Este es el aspecto más seductor de las epifanías... que, posiblemente, si estamos listos para recibir una, este es el día en que llegará.
Fuentes de información
Significados.com
Sciencedirect.com
02/11/2021