¿LOS AIRES ACONDICIONADOS PRODUCEN MAYOR RIESGO DE CONTAGIO?

 

Parte de los estudios sobre el COVID-19 se han enfocado en descifrar si el virus puede viajar a través del aire, y si es posible que el uso de los aires acondicionados pueda ser una de las causas de propagación mayor de la infección.  

 

En principio, los estudios sobre la propagación del virus, han dejado bastante claro que la principal forma de transmisión del COVID-19, tiene que ver con el contacto de una persona sana, con las gotículas respiratorias que una persona infectada expulsa de su cuerpo, haciendo que las mismas ingresen al sistema respiratorio de la persona sana, contaminándola.

 

Ahora bien, dado que esas gotas expulsadas del aparato respiratorio tienen un cierto peso, es posible que las mismas queden suspendidas en el aire por un tiempo antes de caer al suelo; lo cual ha tenido un debate importante sobre si el virus también se puede transmitir a través del aire. Un estudio de The New England Journal of Medicine, determinó que el tiempo en que el virus puede “permanecer viable” en el aire es de hasta por 3 horas; pero que esa suspensión solo se mantiene en forma de aerosol por media hora.

 

Por ello, es lógico pensar que en una habitación cerrada, queden concentradas por un mayor tiempo las micro partículas que las personas expulsan, pudiendo acrecentar el riesgo de contagio si existiere algún infectado dentro de la habitación.

 

Si esas gotículas pueden quedar concentradas en una habitación, ¿podríamos pensar entonces, que el riesgo se hace mayor si esa habitación tiene un aire acondicionado?

 

A este respecto el Profesor Asociado de Medicina en el Icahn School of Medicine en Mount Sinai en la ciudad de Nueva York, Waleed Javaid, ha explicado que los sistemas de aires acondicionados,  de calefacción o ventiladores, mueven corrientes de aire dentro de las habitaciones, produciendo una movilidad o desplazamiento mayor de las gotas respiratorias que pudieran estar suspendidas; ocasionando un mayor riesgo de exposición al virus a través del aire.

 

Esta particularidad, se ha analizado en conjunto con los picos más altos de contagios que se han observado en regiones específicas de los Estados Unidos, en donde algunos estados del sur del país que presentan niveles muy altos de temperatura, han evidenciado picos muy dramáticos de la infección en la época del verano, atribuyéndoseles a que por el calor, es más frecuente el uso de los sistemas de ventilación como los aires acondicionados; aunque otros estudios atribuyen a que esos picos se deben a la resistencia generalizada de los habitantes, a usar la mascarilla sanitaria.

 

Por tal razón, vemos que los estudios aún no presentan una uniformidad como para afirmar que efectivamente se pueda acrecentar el riesgo de propagarse el virus a través del aire o peor aún, por el uso de los aires acondicionados; por lo que, lo más recomendable será tomar medidas de prevención en lugares cerrados que poseen sistemas de ventilación, como la apertura de ventanas cada cierto tiempo durante el día, de manera que se permita la circulación del aire; el cambio frecuente de los filtros del aire, o su sustitución por aquellos que están diseñados para eliminar partículas; y por supuesto, evitar conglomerados dentro de las habitaciones, ya que una de las principales formas de evitar el contagio es mantener la distancia entre las personas, de al menos 1.80m. Asimismo, siempre que se pueda, se deberá optar por los lugares abiertos con circulación de aire natural así como espacio para el distanciamiento, en vez de espacios cerrados.  

 

Igualmente, la premisa seguirá siendo el correcto y frecuente lavado de las manos, evitar tocarse la cara, el correcto uso de la mascarilla sanitaria y la desinfección de las superficies. Cumpliendo estas medidas, se podrá reducir en un alto porcentaje el contagio del virus. Recuerden que al cuidarnos, estamos cuidando a nuestros seres queridos y a nuestro entorno.

 

Fuentes de información:

todo-mail.com

bbc.com

30/11/2020

 

 

 

 

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