TODO LO QUE DEBES SABER SOBRE EL COLESTEROL, PREVENCIÓN Y TRATAMIENTO

 

El colesterol se considera una plaga de la sociedad moderna – parece que todo el mundo lo padece – y  es una de las grandes causas de mortalidad. Esto se debe a que en las arterias de nuestro cuerpo se pueden crear depósitos de colesterol (que es una grasa espesa) que pueden llegar a obstruirlas y producir problemas como el infarto.

 

Sin embargo, el colesterol es un elemento necesario para la vida, ya que sirva para sintetizar adrenalina (la hormona del estrés) y   hormonas sexuales. Por lo tanto, un buen control del colesterol es importante de cara a prevenir muchas enfermedades de la sociedad moderna, pero tampoco es bueno tenerlo demasiado bajo. Tener colesterol es necesario, pero tenerlo elevado es indeseable.

 

Hasta hace poco se consideraba un caso de colesterol elevado cuando las cifras de los análisis detectaban más de 200mg/ml. Sin embargo, estas cifras han ido reduciéndose en los últimos años, ya que una cosa es el colesterol normal en la población y otra el deseable. Antes se consideraba que el colesterol debía mantenerse por debajo de 245mg; unos años más tarde se rebajó la cifra a 220, y hoy en día está en 200, pero algunos médicos opinan que debería estar por debajo de 180. No hay consenso.

 

Si deseas saber todo sobre el colesterol, sigue leyendo los conocimientos que nos brinda el Dr. Berdónces, médico cirujano y naturista reconocido en toda Europa por sus excelentes investigaciones y numerosos libros publicados.

 

 

 

 

Causas del colesterol elevado

La principal causa es la alimentación; y la alimentación occidental moderna es la gran culpable, sobre todo por el gran consumo de grasas, de tipo saturado, a que nos tienen acostumbrados. La ingesta de grasas saturadas se ha multiplicado por tres o por cuatro en los últimos 80 años y los niveles de colesterol, en consecuencia, se han elevado también.

 

Sin embargo, una dieta rica en grasas saturadas y colesterol no es la única responsable del aumento de la tasa de colesterol en la sangre. El consumo de margarina sin colesterol también lo aumenta; y es que las margarinas son grasas saturadas artificialmente, con ácidos grasos en disposición trans, una disposición  anómala en la naturaleza. Los nutricionistas estadounidenses, después de clamar en contra de la grasa saturada durante décadas, han advertido que las proteínas, de las cuales nuestra dieta es excesiva, también son graves responsables de este problema. 

 

El consumo de aceites vírgenes de primera presión en frío y de vegetales oleaginosos pueden mejorar el colesterol, porque las grasas de calidad desplazan a las malas (productoras de colesterol).

 

Sin embargo, existe una confusión general en cuanto al colesterol bueno y el colesterol malo; porque muchos creen que por tener bueno no tienen ningún riesgo de padecer una enfermedad cardíaca. Vamos a aclarar estos conceptos.

 

Colesterol bueno y colesterol malo

El colesterol es una lipoproteína; una especie de bolita de grasa con una cobertura de proteína. Podríamos decir que el colesterol circula por nuestra sangre formando pompas o glóbulos de grasas. Estos globos de grasa pueden ser muy grandes, grandes, pequeños o muy pequeños, lo cual se corresponde con el colesterol de muy baja, baja, alta o muy alta densidad. Cuanto más pequeño sea el globo, más alta será su densidad o peso específico. Es mejor tener una proporción elevada de globos pequeños que de grandes, ya que los pequeños son el colesterol “bueno” y los grandes el “malo”.  

 

Pero vamos a dar otra explicación más sencilla: un globo de grasa muy grande posee mucha grasa y poca envoltura proteica, mientras que un globo de grasa pequeño tiene menos grasa y más proteína.  Por lo tanto, lo que cuenta en realidad es la cantidad total de colesterol que tenemos, independientemente de que éste sea bueno o malo. Otra cosa que debe tenerse en cuenta es que nuestro cuerpo necesita de estos dos tipos de colesterol, ya que cada uno cumple funciones específicas en el metabolismo corporal. 

 

Si solo tuviéramos colesterol del bueno y nada del colesterol malo, tampoco podríamos vivir. La bondad y la maldad del colesterol es muy relativa y solo depende de las proporciones que haya entre un tipo y otro.

 

Otro de los factores importantes – al cual no se le da demasiada importancia – es el de la frescura del colesterol de los alimentos. Se ha visto que la agresividad del colesterol frente a nuestras arterias depende de su grado de oxidación. El oxicolesterol (o colesterol oxidado) tiende a depositarse en nuestras arterias, mientras que el no oxidado no suele hacerlo con tanta facilidad.

 

Los procesos de conservación de los alimentos oxidan el colesterol. En este sentido, la calidad y frescura de los alimentos con colesterol es muy importante. Muchos aspectos de la industria alimentaria hacen que los alimentos que tomamos tengan factores de nocividad especiales. 

 

Otras fuentes de colesterol

Una parte del colesterol que circula por nuestro cuerpo no viene directamente por la vía alimentaria, sino que lo sintetiza nuestro organismo; especialmente el hígado, que puede fabricar unos dos gramos diarios. Existen, sin embargo, personas que son verdaderas fábricas de colesterol y que incluso haciendo una dieta correcta sufren de este problema. Los médicos no se ponen de acuerdo en cuál es la implicación dietética del colesterol y qué porcentaje tiene la implicación genética, pero parece ser que ambas tienen influencia.

 

Síntomas de colesterol elevado

Uno de los problemas de las personas con colesterol elevado es que no presentan síntomas. Incluso cuando existen lesiones ateroscleróticas importantes que pueden producir un infarto o problemas que pueden acabar con la vida del individuo, puede que no haya ningún síntoma y que la persona se encuentre perfectamente o, en todo caso, como siempre. Por este motivo es tan importante hacerse valoraciones rutinarias del colesterol, por ejemplo, cada dos o tres años a partir de los cuarenta años, si no hay ninguna alteración importante.

 

Medidas que evitan el aumento del colesterol

La primera medida es dietética. Debemos hacer una dieta cardiosaludable que elimine las grasas que no sean de origen vegetal, que no tenga un exceso de energía (o sea, que no nos engorde) y que tenga abundancia de cereales integrales y de fibra dietética, que está presente en frutas y verduras, verdaderos desengrasantes de nuestro organismo.

 

El estilo de vida también es importante porque algunos hábitos como el tabaquismo oxidan el colesterol de forma más rápida y la vida sedentaria ocasiona una mayor patología de las arterias que facilita el depósito del colesterol.

 

Una dieta con orientación vegetariana y unos hábitos de vida correctos son el elemento básico para nuestra salud cardiovascular.

 

Suplementos alimentarios

Estos suplementos se añadirán en función de los niveles de colesterol más o menos elevados.

 

Ajo. Un diente al día o la cantidad equivalente de las presentaciones farmacéuticas.

 

Lecitina de soya. Dos cucharaditas al día, en las comidas.

 

Alfalfa. Tomar alfalfa germinada de manera recular. Es un alimento delicioso y fácil de preparar.

 

Germen de trigo. Dos cucharaditas al día, en las comidas.

 

Cúrcuma. Media cucharadita diaria de la especia en polvo, con un poco de agua o en las comidas.

 

 

TIZANA PARA COMBATIR EL COLESTEROL

 

Ingredientes

25g de hojas de alcachofera (Cynara scolymus)

25g de raíz de bardana (Articum  lappa)

 

Preparación

Se prepara una infusión poniendo a hervir en agua dos cucharaditas de la mezcla por cada taza. Se deja reposar unos minutos, se cuela y se sirve.

 

 

Dr. José Luis Berdónces

Médico cirujano

Médico naturista

ESPAÑA

 

 

¡Esperamos que esta información te haya sido útil!

Recuerda seguir nuestras publicaciones de salud y bienestar a través de nuestras redes sociales @biendesalud, @perezalbela, y nuestra página web www.magnesol.pe.

 

 

23/06/2022

Compártelo